PADECIMIENTOS FRECUENTES EN LOS OJOS (Pimera parte)

Debido a que últimamente se ha incrementado el número de pacientes que acuden al examen de la vista porque su visión está muy disminuida y por lo general se trata de personas que están desinformadas sobre los principales padecimientos de los ojos; ponemos a su disposición la siguiente información para que la gente esté mejor informada sobre dichos padecimientos oculares. En esta primera parte de este artículo damos a conocer en qué consisten los principales padecimientos del ojo y sus tratamientos intentando de esta manera crear conciencia en la comunidad acerca de la importancia que tiene el sistema visual en nuestra vida diaria, esperando que con esta información las personas puedan prevenir a tiempo los distintos casos de ceguera, acudiendo a la revisión visual por lo menos dos veces al año con el médico oftalmólogo o a la óptica de su preferencia.

a)      ERRORES REFRACTIVOS
Son aquellos problemas en los que el ojo no enfoca adecuadamente las imágenes sobre la retina. Es el caso de la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo. Padecimientos que se pueden corregir con anteojos o con lentes de contacto. Sin embargo, algunos pacientes que padecen estos defectos refractivos y no quieren usar anteojos, es posible realizar una cirugía con láser con el fin de corregir dichos defectos. 
CIRUGÍA REFRACTIVA
Se refiere a cualquier intervención quirúrgica con el fin de reducir la graduación requerida por el paciente. El procedimiento más común de este tipo es la cirugía de LASIK.

Algunos puntos importantes acerca de estos procedimientos se enumeran a continuación:

Los ojos para este tipo de cirugía necesitan ciertas características para poder ser candidatos:
1. Que la córnea sea transparente, libre de opacidades o irregularidades.
2. Que la córnea tenga un espesor suficiente, de acuerdo a la graduación que se necesite corregir.
3. Que el paciente no tenga alteraciones importantes en la superficie ocular (como resequedad ocular importante, o conjuntivitis alérgica).
4. Que el paciente no tenga alteraciones corneales conocidas como ectasias

5. Que el tamaño de la pupila del paciente no sea demasiado grande.

6. Que las expectativas del paciente sean realistas.

SI SE DETERMINA QUE EL PACIENTE ES CANDIDATO A CIRUGÍA REFRACTIVA, SE LE PUEDE REALIZÁR UNO DE LOS SIGUIENTES PROCEDIMIENTOS:
1. QUERATECTOMÍA FOTORREFRACTIVA (PRK):
Se utiliza para graduaciones no muy altas y pacientes cuya córnea no tiene el grosor suficiente para someterse a un procedimiento de LASIK.  En este procedimiento se retira la capa más superficial de la córnea (llamada epitelio), y se aplica sobre la superficie corneal (ya sin epitelio) un tipo especial de láser denominado éxcimer, que va a “tallar” la superficie de la córnea para adecuarla a la graduación que el paciente necesita.

2. LASIK CONVENCIONAL:
En este procedimiento se corta con una navaja llamada microqueratomo, un delgado colgajo (una especie de “rebanada” de la córnea)  que es levantado, dejando una pequeña bisagra. Posteriormente se aplica láser éxcimer sobre la superficie corneal para tallar la superficie de la misma, y adecuarla a la graduación que el paciente necesita. Posteriormente el colgajo corneal se coloca en su lugar original para cubrir la zona tratada.

3. LASIK CON INTRALASE:
Es similar al anterior, pero en lugar de utilizarse una navaja (microqueratomo) para realizar el colgajo de la córnea se utiliza un láser especial llamado láser de femtosegundos.
Si el procedimiento se realiza en el paciente que cumpla las características adecuadas, existe una muy alta probabilidad de que la graduación del paciente disminuya significativamente, y que el paciente alcance una buena agudeza visual sin anteojos (aunque algunos pacientes siguen requiriendo anteojos de menor graduación para obtener una agudeza visual muy fina).

         OTROS PADECIMIENTOS FRECUENTES EN LOS OJOS

RETINOPATÍA DIABÉTICA Es una afección de la retina que ocurre en pacientes con diabetes mellitus después de varios años de padecer la enfermedad, y especialmente cuando la enfermedad no está bien controlada. La importancia de la retinopatía diabética radica en que es una de las principales causas de ceguera irreversible, y que puede prevenirse tomando las precauciones adecuadas y aplicando el tratamiento oportunamente. Cuando se encuentra en sus fases tempranas no causa ningún síntoma. Esa es la razón por la cual todo paciente diabético debe ser sometido a una revisión de fondo de ojo  por lo menos una vez cada año, y si se detectan alteraciones en la retina, se tienen que realizar revisiones más frecuentes.

La retinopatía diabética ocurre porque los niveles elevados de glucosa (azúcar) en la sangre poco a poco van causando daño a los vasos sanguíneos de la retina, y después de varios años quedan muy afectados, por lo que  la circulación en la retina se deteriora enormemente ocasionando que sus células sufran de falta de oxígeno lo que a su vez hace que produzcan una sustancia llamada VEGF. Esta sustancia hace que los vasos sanguíneos aumenten su permeabilidad; es decir, estos vasos sanguíneos empiezan a fugar sustancias que los vasos normales no deberían dejar salir, lo cual produce acumulación de líquido en la retina (edema macular), y la visión disminuye.

Si esto continúa por mucho tiempo, la retina sigue sufriendo de falta de oxígeno y se empiezan a producir nuevos vasos sanguíneos con la intención de  llevar más oxígeno a la retina.  Pero estos nuevos vasos sanguíneos son defectuosos y causan las complicaciones graves de la retinopatía diabética ya que pueden romperse y causar hemorragia en el humor vítreo, o pueden formar membranas fuertemente adheridas a la retina, que con el tiempo se contraen y causan desprendimientos de la retina, y eventualmente ceguera.

Por eso la importancia para los diabéticos de ser examinados por un oftalmólogo por lo menos una vez al año ya que si  se encuentran datos leves o moderados de retinopatía diabética, las revisiones de fondo de ojo deben hacerse con mayor frecuencia (cada 4-6 meses).
Si se observa edema macular que cause baja de visión se trata con la aplicación de láser, o  medicamentos inyectados dentro del ojo, o la combinación de ambos.
Cuando ya se observan nuevos vasos sanguíneos (retinopatía diabética proliferativa), es necesario aplicar fotocoagulación con láser a toda la retina (excepto la región central), para prevenir las complicaciones de hemorragia vítrea y desprendimiento de retina.
Si el paciente tiene ya hemorragia vítrea o desprendimiento de retina que amenace el área central de la visión, el paciente puede necesitar ser sometido a una cirugía denominada vitrectomía.
Si la retinopatía diabética se detecta, y se trata a tiempo, el paciente tiene altas posibilidades de conservar una visión útil por mucho tiempo.
Algunas personas tienen la idea errónea de que en un paciente que tiene diabetes mellitus tipo 2, que por mucho tiempo se controló con medicamentos por vía oral, pero que ahora requiere insulina, la insulina lo va a dejar ciego. Este concepto es totalmente erróneo, dado que lo que deja ciego al paciente son los años de ser diabético con muy mal control. La insulina es precisamente lo que va a hacer que los niveles de glucosa en la sangre se controlen, y por lo tanto se frene el avance de la retinopatía diabética.

OTROS PADECIMIENTOS FRECUENTES EN LOS OJOS

b)      DEGENERACIÓN MACULAR  RELACIONADA A LA EDAD (DMRE)

Es la principal causa de visión baja en pacientes mayores de 60 años. La mácula es el área central de la retina, y se ocupa de la visión fina que utilizamos para leer, ver la televisión, ver las facciones de las personas y en general la visión de los detalles finos.

Debido a la edad, las células de una de las capas de la retina llamada epitelio pigmentario de la retina ya no pueden realizar su actividad normal, que es mantener “limpio” y en buenas condiciones el ambiente celular, para que el resto de las células de la retina puedan funcionar correctamente.

LA DEGENERACIÓN MACULAR RELACIONADA A LA EDAD TIENE DOS ETAPAS:

La primera se denomina seca, y consiste en que en el área central de la retina se observan unos depósitos de material anormal denominados drusas. La mayoría de los pacientes que se encuentran en esta fase pueden encontrarse completamente sin síntomas y tener una muy buena visión, pero en fases avanzadas la visión central puede verse afectada de manera leve, y en algunos casos de manera importante.

La segunda etapa se denomina húmeda, y se caracteriza porque debajo de la retina del área central crece una red de vasos sanguíneos anormales (llamada membrana neovascular). Estos vasos sanguíneos, al ser anormales, permiten que mucho de su contenido se fugue, de tal manera que se acumula líquido por debajo de la retina, y en ocasiones pueden causar sangrados. Cuando aparece una membrana neovascular, el paciente puede tener metamorfopsias, es decir, que las cosas se ven distorsionadas, o puede ver una mancha en el área central (denominada escotoma).

Para la degeneración macular seca no existe tratamiento. En algunos casos se recomienda tomar suplementos alimenticios que contengan antioxidantes y unas sustancias llamadas luteína y zeaxantina. Se recomienda también control de la presión arterial (si es que el paciente padece hipertensión arterial), dejar de fumar (si es que el paciente acostumbra hacerlo), y no consumir anticoagulantes.

Para la degeneración macular húmeda el tratamiento consiste en la aplicación de una o varias inyecciones dentro del ojo de medicamentos conocidos como “antiangiogénicos”, cuya intención es hacer desaparecer la membrana neovascular. Con este tratamiento, más del 90% de los pacientes mantienen la visión, y en aproximadamente dos terceras partes de los pacientes la visión mejora, siempre y cuando el tratamiento se aplique de manera oportuna, y no haya mucha cicatrización.

Si deseas más información sobre los padecimientos de los ojos y como prevenirlos visítanos en Óptica San Gabriel de Santiago Juxtlahuaca.

 ...............................Continua en la segunda quincena de septiembre