miércoles, 17 de julio de 2013

Axel, un renacer de la oscuridad a los colores y las formas



 Huajuapan, Oax.- Sin poder comprender del todo, la manera en que Axel Ariel percibe el mundo que le rodea, con escasos 5 años y una ceguera congénita el infante lucha por acomodarse a su entorno y en ese transitar sin conocer los colores y formas, ha encontrado en el modelado de barro y la pintura un refugio y una manera  de  adaptarse a una vida normal.

  Tras un peregrinar por varios jardines de niños que lo rechazaron por ser ciego, Axel Ariel Marín Ramírez, finalmente logró ser aceptado en colegio de educación prescolar, General Antonio de León, en donde recibe una educación similar a la del resto de sus compañeros, gracias al apoyo de la profesora Cinthya Alavés Ramírez, que pertenece a la Unidad de Servicios de Apoyo a la Educación Regular (USAER).

  El trabajo de Alavés Ramírez, consiste en ayudar a Axel Ariel a integrarse plenamente al resto de sus compañeros, con apoyo pedagógico, de lenguaje y ejercicios para introducir posteriormente el aprendizaje del sistema Braille.

  Con una retino-plastia de bebé prematuro, para Axel Ariel representa un reto en su corta vida poder ir entendiendo las formas y el significado de los colores, Alavés Ramírez, explica que todos tenemos una referencia visual para distinguir, formas, objetos y colores, en el caso de niños con ceguera congénita eso es imposible, pero se agudizan extraordinariamente sus otros sentidos como el tacto y el oído. 

  La profesora Alavés Ramírez, añade que  es muy común que niños como Axel Ariel sufran el rechazo de otros niños y de instituciones educativas por su condición “nosotros mismos segregamos” –dice-, y se debe saber que todos tenemos derecho a llevar una vida normal y a recibir una educación, eso es lo que se hace con Axel.
  Se ha comprobado –agrega- que los infantes que interactúan con niños que sufren algún tipo de discapacidad, “se vuelven más sensibles”, pues aprenden a ofrecer un trato de respeto y ayuda con aquellos que enfrentan desventajas como Axel.

  Refiere que circunstancialmente se invitó a Axel Ariel a participar en los talleres de modelado de barro y pintura que se ofrece en la Casa de la Cultura de Huajuapan, a cargo de la maestra y artista plástica Diana Hernández Roque, quien con humilde paciencia   ha  enseñando a través del tacto de las manos de Axel las formas de diferentes objetos que posteriormente son trasladados al modelado de barro.
Ver con las manos 

 Su interacción con otros niños –expone Hernández Roque- permite sensibilizar y concientizar  quienes no tienen el impedimento de la vista y al mismo tiempo se le ofrece a Axel Ariel, la oportunidad de ser tratado como un niño normal, cualquier rechazo en apoyarlo se debe tomar como discriminación, “nosotros no lo tomamos así, al contrario nos motiva y fortalece su creatividad”.

Agrega, que para ella ha sido maravilloso intentar percibir la realidad que nos rodea de la manera en que Axel lo hace, el agudizar los sentidos para intentar acercarse a la manera en que Axel interpreta los colores y formas cuando se le explica como es y para que sirve cada objeto que toca.

   La presencia de Axel Ariel, en el taller de modelado de barro y pintura –concluye-  nos ha permitido también en ayudar a otro menor de los que se consideran niños problemas, por el cúmulo de conflictos emocionales que arrastran y que  se traduce en rebeldía y desobediencia. Y sin mencionar el nombre del infante asegura que su comportamiento ha mejorado sensiblemente por su convivencia con Axel.

  Mientras tanto Axel sigue acudiendo a los talleres ordinarios de la Casa de la Cultura tres veces por semana, apoyado por su madre Janet Ramírez Victoria, quien expone que por los cuidados que requiere su hijo para integrarse plenamente a la sociedad a pesar de su falta de visión, tuvo que dejar de trabajar.

  Su padre José Luis Marín Campos, es empleado de una mueblería que trabaja arduamente para mantener a su familia y tratar de reunir fondos para conseguir un aparato auditivo que también requiere su hijo Axel. Pese a todo eso, el matrimonio Marín Ramírez, no desfallece en su intento y al igual que las maestras Alavés Ramírez y Hernández Roque tratan de ofrecerle a Axel la oportunidad de llevar una vida normal.


  Por su parte Axel, quién en el desarrollo de las entrevistas evidenció diferentes estados de animo se retira por un momento de las manos de su maestra, se acerca a la ventana de sus salón de clases inclina la cabeza para escuchar mejor a la  banda de música que hace sus ensayos en el interior de la Casa de la Cultura, escucha el jarabe mixteco y alegremente se pone a bailar tomando las manos de su maestra Diana. Ese es su mundo.

Texto y
 Fotografía: Eduardo Cruz Silva


2 comentarios:

  1. Triste pero tambien hermosa historia la de Axel, ojala y las personas lo sigan apoyando para que el siga desarrolando sus sentidos y sus capacidades. Animo pequeño guerrero.

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  2. somos la diferencia de lo social en lo humano... por que de uno depende los limites q nos ponemos... abrir los ojos como Axel Ariel es la mirada de caminos firmes!!!! gracias por la nota m querido Ed Cruz.

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